¡Entra en mi post! ¡Te vas a sorprender!
Hoy vamos a poner un
caso práctico y, además, real (lo veo a diario en consulta), la llamaremos
Marga* (obviamente nombre ficticio) y ha hecho tropecientas mil dietas. ¿Su mejor amiga? ¡La báscula!
Marga se levanta cada mañana, se pone la bata con un ojo medio abierto y se va al baño. Antes incluso de vestirse, se quita la bata (toda ropa pesa) y se sube a la báscula esperando ver un número mágico que le indique que lo está haciendo bien, a fin de cuentas, lleva toda la semana a base de lechuga, va al gym cuatro veces a la semana (antes no iba nunca) y... el sábado le dijo a su amiga del alma que no podían quedar a cenar por que sabia que de hacerlo terminaría comiendo el postre en el restaurante, mucho sacrificio para Marga.
Su amiga la báscula le dice que no, que no ha llegado a su peso "ideal" y que encima, por arte de magia, ha subido 200 gramos! ¡¡¡¡¿Pero qué... c*ñ*o..?????!!!! Marga está decepcionada, frustrada y sobretodo muy confundida por que tampoco sabe qué ha hecho mal.
¿Te suena la historia? Pues es tan real como tú y como yo....
El problema de Marga no es otro que usar su peso (el numero que aparece en la báscula) como indicativo de que lo está haciendo bien.
Te recomiendo dos cosas en este post:
1- Tira la báscula por la ventana, no sirve para nada o si te duele... véndela por Wallapop.
2- Tatúate en la frente " EL PESO IDEAL NO EXISTE"
¿Cómo?
Lo que lees, el peso ideal no existe. El peso ideal
es un mito muy comercial que queda bien dentro de la industria. Sin más.
Si bien es cierto que se puede calcular de forma muy sencilla, también es cierto que no hay estudios que avalen que el resultado será tu peso ideal y ademas, debes saber que el cálculo está basado en la intuición.
Y también tenemos ese cálculo famoso del IMC en el que mi novio de 1'80 de altura y atlético, aparece como obeso aunque tiene un porcentaje graso de solo un dígito.
El problema reside en que usamos ese valor numérico como indicativo de algo cuando realmente lo que importa es a qué se debe ese peso, peses lo que peses.
Y tampoco la báscula te va a decir si hoy te sientes mejor contigo mism@ que ayer.
Nuevos indicadores a la vista.....
Te propongo que dejes de pesarte. ¿Te parece muy normal y lógico esperar que un número te identifique cómo persona? ¿Verdad que no? Al igual que tu cuenta bancaria no dice nada de ti, tu peso tampoco.
Por eso, deja de hacerte daño y busca otro indicador...
Por ejemplo, sentir-te más ágil para tus clases de yoga, poder subir las escaleras hacia tu casa sin ahogarte, poder bajar un enganche de tu sujetador, poder abrocharte los zapatos con facilidad, poder dormir mejor y descansar, tener más horas al día por que después de comer no sientes la necesidad repentina de tener que dormir casi por obligación...
¿Cual es el tuyo?
¡Un saludo!
Yhasmina
