miércoles, 11 de febrero de 2015

Misión imposible: "Lograr que tu hijo coma verduras"

Mi madre es chef, tiene la titulación y muchos años de experiencia, y después de doce horas en una cocina aun tenia fuerzas para batallar conmigo en casa, creo que ser padre o madre es el oficio mas duro. Por eso, imaginaros, si a una chef le dice una niña de seis años "El brocoli es asqueroso.¡No!" como le sienta. Recuerdo esa semana, o mejor dicho, esa batalla entre muchas, ya que reconozco que yo no era una niña buena comedora, al contrario. ¿Sabéis como solucionó mi madre el problema con el brocoli? Estuve una semana comiendo brocoli como entrada hasta que terminó gustándome. Quizás no es la solución mas pedagógica, pero si el fin justifica los medios, ahí esta ese éxito que se marcó ella. Ahora bien, no todos los padres tienen esa paciencia o esa mano dura, según como se mire, quizás a muchos les resulte dura la negativa de sus hijos, por un temor inexistente de que mueran de hambre en este país o esos berrinches que los progenitores interpretan como verdadero sufrimiento.
¿Quieres saber algunos trucos para que coman verdura? ¡Sigue leyendo!


- Es importante evitar en la medida de lo posible que los niños picoteen, ya que por una parte les
aporta saciedad de cara a la comida principal que sí deben hacer y por otra suelen picotear alimentos que no les suelen brindar un favor nutricional. En este grupo incluiríamos también jugos o como de costumbre, esos refrescos gaseosos. Si un niño no llega con apetito a su comida empezará a descartar todo aquello que de por sí ya le cuesta comer, como en este caso, las verduras.

- Procura preparar tentempiés creativos a base de frutas o verduras acompañados de salsas untables sanas.

- Hay un error que es frecuente, se pone la verdura como condimento en un plato acompañando un bistec o algo que resulta mas apetitoso. ¡Error! Prueba a dar la verdura en un solo plato como entrada, explica lo que luego precede a este plato al niño y que deberá comer antes la verdura. ¡Y mantente firme! Una vez se termine ese plato sirve el resto de comida.

- ¿Por que no pruebas con distintas salsas? Me refiero a jugo o salsas sanas, que pueden ayudar a mejorar el sabor de las verduritas para los peques. Por ejemplo, con unas gotas de limón casi todo tiene mejor sabor.

- Visita la verdulería con la frecuencia que tu agenda te permita y elige una gran variedad de ellas, así no les resultara repetitivo.

- Cada vez que el niño tenga que probar una variedad nueva, muestra entusiasmo con la novedad.

- Hay otro tema que me gustaría tratar y es que desde luego el niño no va a comer las verduras si observa que algún comensal en la mesa no las tiene. Por ello es importante que todos los comensales coman lo mismo en cuanto a composición de los platos. ¡Da ejemplo y como saludable!

- ¿Puedes visitar un mercado o una feria gastronómica? Llévate contigo a la familia. Si involucras a
tu hijo en el hecho de comprar tendrás la oportunidad, a parte de tener una experiencia divertida, de poder hacer que tu hijo contemple la variedad y también de explicarle tu mism@ que aportan las distintas verduras y hortalizas a su cuerpo. A los niños les encanta saber más sobre su organismo, para ellos es una novedad y esta siempre en constante cambio.

- En mi caso era posible, por suerte me crié en un pueblo y mis abuelos siguen teniendo su huertecillo de hortalizas y verduras, si tu también tienes la oportunidad, haz que tus hijos cultiven productos, si se involucran desde un inicio te costará menos hacérselas comer.

- Mételos en la cocina siempre que puedas, ya me imagino que los martes esta todo muy justo de tiempo, por ello aprovecha las fines de semana para hacer que tu hijo te ayude a cocinar. Si tu hijo elabora una ensalada es muy difícil que después le cueste comerla y lo mismo vale para cualquier tipo de comida. Un niño puede participar en la elaboración de comida siempre vigilado por un adulto, claro, cortando verduritas blandas con un cuchillo sin filo, revolviendolas o si no te fías, quitando los cobitos de las frutas.

- Es muy buena idea adquirir uno de esos libros de recetas saludables editados apropósito para que las elaboren los niños. Pídeles un día a la semana que elijan una, hagan la lista de lo que necesitarán (para que tu lo compres) y la elaboren.

- Otra muy buena opción es tener un abanico de tres opciones en verduras que tus hijos puedan elegir, hazles elegir una de las tres para que la coman e incluso si dispones de tiempo, que ellos mismos la preparen.

- ¡No abandones estas practicas! Lo mas lógico y normal es que en la primera puesta en marcha tu hijo te diga "¡No!" . Cuando intentes introducir nuevos alimentos o introducir los que antes de leer esto ya te han rechazado,intenta servirlos al menos cinco veces antes de resignarte. No aceptes un "no" como respuesta definitiva, vuelve a ofrecérselo con calma y respeto y no te enfades ni montes numeritos. Numerosos estudios demuestran que las reiteradas oportunidades pueden modificar la respuesta de un niño.

- No predispongas que a tus hijos no les gusta determinado alimento, cambia el chip y enfocate en que "no les gusta por que lo desconocen y no han aprendido a disfrutarlo".

- Mantén firmeza y no des opciones, es decir si él ha elegido una verdura para comer y no la come, no le des la opción de darle el bistec, un niño percibe que su madre se ablanda y por ello insiste hasta que esta cede. Si tiene hambre de verdad comerá esa fruta, esa verdura o esa hortaliza.

- No sobornes a tu hijo, muchas veces oigo a los padres decirle "si comes las judías te daré un flan", premiar a un niño con alimento es sumamente peligroso de cara a su futuro, ya que lo que fomentas con esa conducta es que aprenda a premiarse o a buscar refugio en la nevera.

- Marca una hora limite para la comida, cuando yo era pequeña en mi casa tenia el horario muy marcado, pero cuando iba a casa de mi abuela se me juntaba la comida con la merienda ante la negativa de no comer determinados alimentos. Esto no debería ser. La hora de la comida empieza por ejemplo a las 13:00 y termina a las 15:00, si el niño aun no ha terminado su plato o no ha ni siquiera empezado a comer, retira el plato a la hora de finalización y comunícale que volverá a comer a la hora de la merienda.


Estos son algunos de los humildes consejos para conseguir que vuestros peques coman eso que menos les atrae.




Y ahora con esta información haz lo que quieras, pero que no se diga que nadie te lo había dicho.


Un saludo







Yhasmina

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