martes, 29 de enero de 2019

¡Cambia!

Al principio de semana os decía "o cambias o todo se repite". ¿Lo has meditado? Pues en mi post de hoy te muestro mi teoría del cambio para enfocarte hacia un estilo de vida saludable. ¡Sigue leyendo!

De que todos los cambios son buenos me percaté hace ya tiempo, aunque algunos duelen, pero son
necesarios. ¿Quien no necesita un cambio? Creo que todos lo hemos pensado, a fin de cuentas los seres humanos estamos diseñados para movernos y no para estar estancos en el mismo sitio, el problema aparece cuando no nos movemos, cuando parecemos no avanzar o evolucionar y con ese momento, se nos destapan muchos medios, muchas frustraciones y mucho tedio a lo que después llamamos algo así como "ansiedad". Yo, que recuerdo, no soy psicóloga, siempre he pensado que eso a lo que llamamos "ansiedad" o mejor dicho, ese sentimiento, no es otra cosa que la "necesidad de cambio que no se produce". ¿Qué te parece mi teoría? ¿Me la compras? jejeje. Muchas veces tenemos tanto miedo a movernos por no salir de la zona de confort, por no exponernos a un juicio o a un rechazo o a un simple y sencillo "no", que permanecemos ahí, inmóviles, viendo pasar nuestra vida detrás de una especie de cristal, sabiendo y necesitando cambiar, pero no lo hacemos. ¿Cómo hacerlo?
¡Es una enorme pregunta!

Decidirse a cambiar no es fácil, nunca lo es, de hecho es una de las decisiones mas valientes pues requiere de mucho empeño, tiempo, enfoque y motivación y sobretodo de muuucha, muchisma paciencia, que creo que a todos nos falta.¡Ah! Por cierto si quieres entrenarla te dejo mi podcast del pasado viernes que puedes escuchar AQUÍ para que lo hagas con una serie de ejercicios muy sencillos.


Una vez visualices esa necesidad de cambio te felicitaré por que ya tienes mucho ganado, ahora bien... deberás ser consciente y asumir que salir de ahí, de ese ciclo que tenias montado y sueles enfocar en lo que comes o consumes (entre otras cosas) te va a costar, es como una relación sentimental de esas toxicas en las que sabes que debes coger la puerta e irte pero eres incapaz de dar un paso hacia ella. ¿Te has sentido nunca así? Pues eso, eso mismo te pasa ahora si es que necesitas este cambio, lo que debes preguntarte precisamente para motivarte a coger esa puerta de una vez por todas es "¿Para qué lo necesito? " Y cuando de forma sincera te hayas podido contestar algo mas allá del "para comer saludable o sentirme mejor" sabrás que estas en la carretera correcta.

Un saludo,




Yhasmina

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Qué opinas?